Hora de repensar el clitoris

Hora de repensar el clítoris

Sharon Mascall

Los hallazgos de la doctora O'Connell podrían hacer que se reescriban algunos libros.

Por dos milenios kleitoris, una palabra griega, fue la raíz de "pequeño monte". Sin embargo la uróloga australiana, Helen O'Connell, reveló que la forma del clítoris se parece más a la de una montaña, que a la de una colina.

Su conclusión está obligando a que se reescriban los libros de anatomía y a que se replantee el tema entre los profesionales de la medicina.

Por otra parte, las conclusiones también podrían tener repercusiones en cómo las mujeres enfrentan los problemas de incontinencia.

"La pared vaginal es, de hecho, el clítoris", dijo desde Melbourne la doctora O'Connell.

"Si usted levanta la piel de la vagina en las paredes laterales, encuentra las vulvas del clítoris: masas triangulares de tejido eréctil en forma de medialuna".

Rivalidad

Todo se reduce a la rivalidad entre los sexos: la idea de que un órgano es sexual y el otro reproductor Helen O'Connell

Frustrada por reprobar un examen médico, O'Connell, recurrió a los libros de anatomía para encontrar respuestas. Así fue que descubrió que estaban equivocados.

"Ellos lo dejaron fuera", dijo. "Todo se reduce a la rivalidad entre los sexos: la idea de que un órgano es sexual y el otro reproductor".

"La verdad es que ambos son sexuales y reproductores", agregó.

El Fondo Australiano para el Médico, un organismo de investigación, exige ahora que se dedique más tiempo a la anatomía en las facultades de medicina australianas.

La enseñanza de ciencias básicas -incluyendo bioquímica, patología y anatomía- es tan inadecuada, dice el organismo, que se ha hecho una solicitud al gobierno federal australiano, para exigir una revisión de toda la educación médica.

Imágenes

No obstante, O'Connell cree que la calidad de la instrucción es apenas tan importante como la cantidad.

"La anatomía pélvica no es tan fácil de mostrar ni de interpretar", señala.

"La mayoría de los estudiantes luchan con imágenes basadas en disecciones", añadió.

Para definir la verdadera forma y tamaño del clítoris, la doctora O'Connell prefiere trabajar con imágenes de resonancia magnética (MRI, por sus siglas en inglés).

Al reproducir la pelvis de humanos sanos -en vez de (cuerpos) diseccionados- ella ha encontrado que el clítoris vivo es aún más grande de lo que pensó inicialmente.

"No hay nada similar a la forma de un clítoris", sostiene O'Connell.

"El glande es denso, con terminaciones nerviosas y receptores, allí se concentra la vibración y la sensación", dice, y añade que "toda la forma es como una pirámide".

Implicaciones médicas

Su base forma el genital externo o vulva; sus "paredes" triangulares están envueltas por la uretra y la vagina.

Los antiguos anatomistas no estaban interesados en el clítoris. El pene era mucho más interesante. Era más grande y usted no tenía que usar sus gafas para verlo Margaret Davy

Cuándo hay excitación toda la estructura se ensancha.

"Helen ha realizado un esfuerzo importante para confirmar lo que sospechamos", cuenta la doctora Margaret Davy, directora del departamento de ginecología oncológica del Hospital Real de Adelaide.

"Los antiguos anatomistas no estaban interesados en el clítoris. El pene era mucho más interesante. Era más grande y usted no tenía que usar sus gafas para verlo".

La última investigación de O'Connell indaga en si un dispositivo médico que trata la incontinencia debido al estrés, podría interferir con la función del clítoris.

También existen repercusiones para las mujeres que han experimentado la mutilación genital femenina.

Extraer el glande del clítoris no significa que la estructura entera se pierde, ya que ésta se extiende hacia el interior del cuerpo.

Industria

Sin embargo, es probable que el impacto más grande se vea reflejado en la vida sexual de las parejas que usan su anatomía para su propio beneficio.

"La industria del sexo lo sabe desde hace tiempo atrás", dijo Fiona Patten de la Asociación Eros, el organismo de la industria minorista de artículos de entretenimiento para adultos, en Australia.

"Sólo tiene que mirar el mercado de juguetes sexuales para adultos para ver que no están diseñados para encontrar un botón diminuto en la cabeza de la vagina, (sino que) están diseñados para estimular un área mucho más grande", agregó.