La ampliación del Plan Colombia que pedirá el presidente George W. Bush al Congreso será por siete años, durante los cuales Estados Unidos y Colombia comprometerían inversiones por casi 50 mil millones de dólares, dijeron ayer fuentes del Departamento de Estado.
De ese total, Estados Unidos asumiría compromisos por sólo 3.900 millones de dólares o un 6,7% y el resto correspondería a contrapartidas del Gobierno colombiano por hasta 43.800 millones, dijeron fuentes que hablaron en forma exclusiva para The Associated Press.
El Plan Colombia fue una iniciativa del presidente Andrés Pastrana, propuesta en el 2000, y desde entonces Estados Unidos ha participado con unos 4 mil millones de dólares en el logro de sus tres objetivos básicos: lucha contra las drogas, neutralización de grupos armados y desarrollo alternativo. Pero hasta un 80% de esa ayuda ha sido canalizada para fines militares.
Al completarse este año la primera etapa del Plan Colombia, el presidente Álvaro Uribe, sucesor de Pastrana, ha realizado intensas gestiones para obtener una ampliación, considerando que la tarea aún estaba inconclusa.
Uribe ha visitado Washington en varias ocasiones para hablar de la segunda etapa en una gestión que ahora le resultó exitosa y que el Congreso estadounidense debatiría este año, ya no bajo la etiqueta de Plan Colombia sino como “Estrategia para el fortalecimiento de la democracia y desarrollo social en Colombia”.
El subsecretario de Estado, Nicholas Burns, anunció días atrás que Bush pedirá la extensión este mes, pero no dio detalles. Éstos provinieron luego de otras fuentes del Departamento de Estado que hablaron bajo condición de no ser identificadas.
Se esperaba que la secretaria de Estado, Condoleezza Rice, diera los detalles de la extensión en una audiencia en el Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes durante su comparecencia para defender el presupuesto 2007-08 de su departamento.
El nuevo plan pone un mayor énfasis en la educación, salubridad y servicios sociales y una atención especial en municipios todavía con presencia importante de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc), el principal grupo armado del país.
Los procedimientos no difieren mucho de los actuales: las fuerzas militares establecen primero la seguridad en esos municipios, luego entra la policía. Una vez que las condiciones lo permitan, se restauran los servicios básicos, la educación, atención de la salud y funcionamiento de los tribunales.
Acusación
La Fiscalía General de Colombia llamó ayer a juicio a tres oficiales del Ejército que, al parecer, apoyaron a paramilitares de ultraderecha para asesinar y desaparecer a personas acusadas por esos escuadrones de auxiliar a la guerrilla, informó el organismo.
La decisión de la Fiscalía se produce en momentos en que Colombia es sacudida por un escándalo político por los presuntos vínculos de congresistas con esos grupos armados ilegales, acusados de masacrar a miles de civiles en medio de su guerra contra los rebeldes izquierdistas.
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